Foto de Inés del Valle
En Jonactepec, Morelos, México, la tierra sigue siendo el centro de la vida. Mi tío, agricultor de toda la vida, utiliza la yunta con toros para arar el campo, una práctica ancestral que conecta generaciones.
La fotografía muestra un origen que pocas veces se reconoce: el esfuerzo humano detrás de los alimentos que consumimos. En un contexto donde la industrialización y el abandono del campo amenazan las raíces rurales, la yunta visibiliza un desafío social y ambiental: la falta de reconocimiento a los modos de vida y las tradiciones comunitarias. Su labor es resistencia y solución, pues, al trabajar con métodos sostenibles, preserva el equilibrio con la tierra y promueve una forma de vida más consciente.
A diferencia de las máquinas agrícolas motorizadas, la yunta reduce la emisión de combustibles fósiles y evita la compactación del terreno, preservando su humedad y productividad. Además, mantiene los suelos fértiles a través de la descomposición natural de la materia orgánica, evitando el uso de agroquímicos contaminantes y protegiendo la biodiversidad.
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Autora original:
- Inés del Valle es una artista visual y estudiante de la licenciatura de Comunicación en el Tecnológico de Monterrey. Desarrolla los proyectos personales Inés y Miel, dedicado a la creación de postres estéticos y conceptuales, y Voz de Inés, un proyecto de poesía, activismo emocional y paisajes surrealistas.
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Este artículo es contenido original de la revista de Stanford Social Innovation Review en Español #17
Edición por Sarahi Moreno.
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