OutcomesX aspira a igualar las condiciones de financiamiento entre las organizaciones sin fines de lucro, mediante un sistema que contabiliza los resultados en el impacto social.
A solo días de que Rusia invadiera Ucrania en febrero de 2022, la Fundación UBS Optimus lanzó el Fondo de Ayuda para Ucrania con el fin de permitir que los empleados de UBS y clientes bancarios hicieran donaciones en apoyo a los jóvenes que sufren por causa de la guerra. Sin embargo, la interrogante era cómo identificar las organizaciones dedicadas a esa labor que utilizarían el dinero del fondo con la mayor efectividad posible. La fundación recurrió a OutcomesX (ResultadosX), un mercado que, en ese momento, estaba siendo desarrollado por Jason Saul y Phyllis Costanza, sus fundadores, para convertir el impacto social en "unidades de impacto verificado" (VIUs, por sus siglas en inglés); es decir, unidades que pudieran medirse, valorarse y venderse a los donantes.
Cuando se lanzó OutcomesX, en abril de 2023, se realizó un acuerdo para transferir $2 millones de ganancias en VIUs, que habían sido comprados por la fundación a organizaciones locales sin fines de lucro, todas encargadas de brindar servicios de educación y salud mental a niños en Ucrania.
El nuevo mercado se basa en datos del Registro del Genoma de Impacto (IGR, por sus siglas en inglés), un organismo independiente que define cierta unidad de progreso medible dentro de un problema u objetivo social como, por ejemplo, alguno de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas.
Las organizaciones sin fines de lucro informan al IGR sobre un progreso específico; por ejemplo, el haber permitido que 1,000 familias alcanzaran seguridad alimentaria. Así, el IGR evalúa sus datos mediante estándares basados en evidencia y revisados por pares a fin de verificar y determinar las unidades de impacto social. Actualmente, cuenta con 2.2 millones de programas sociales registrados y más de 3,900 verificados.
Una vez que algún donante especifica una causa y región, el equipo de OutcomesX busca resultados verificados en el IGR que coincidan con dicha solicitud. También, OutcomesX puede crear un portafolio de VIUs de diferentes organizaciones sin fines de lucro si el donante prefiere financiar una causa en lugar de una sola organización. Luego, el donante paga las unidades y una tarifa a OutcomesX, la cual oscila entre el 5 y el 15 por ciento.
Este enfoque revoluciona el financiamiento tradicional. En vez de financiar programas de organizaciones sin fines de lucro cuyos resultados aún no han sido probados, los donantes pueden pagar por resultados que ya se han alcanzado y verificado. Las organizaciones sin fines de lucro reciben el monto total pagado por las unidades, ya sin necesidad de producir informes de impacto tardados y costosos.
Gracias a que los donantes pagan solo resultados verificados, se reduce el riesgo de financiar organizaciones que no son efectivas. "Es un mecanismo más preciso y eficiente para adquirir resultados", dice Saul, quien desarrolló el IGR y también es director ejecutivo del Centro de Ciencias de Impacto de la Universidad de Chicago.
Dado el tipo de subvenciones que el Fondo de Ayuda para Ucrania quería otorgar, OutcomesX le pareció una solución atractiva. "Puede ser difícil identificar organizaciones de base con un historial sólido", dice Marissa Leffler, directora ejecutiva de asistencia humanitaria y salud global de la Fundación UBS Optimus. "La compra de resultados nos brinda una mayor confianza de que nuestro financiamiento está generando el impacto previsto".
Además de confirmar que el dinero de los donantes ha contribuido de manera medible a resolver un problema social, el equipo de OutcomesX desea ayudar con los desafíos que enfrentan las organizaciones sin fines de lucro más pequeñas para recaudar fondos. Al no contar con presupuestos de mercadotecnia, administradores web y equipos de desarrollo, a muchas les resulta difícil competir por financiamiento. "El costo promedio de recaudar capital para una organización sin fines de lucro es de $20 por cada dólar recaudado", dice Saul. "Así que estas organizaciones pequeñas tienen mucho en contra".
Un desafío potencial para los donantes que utilizan OutcomesX es que podrían sentirse desconectados de las causas cuando su donación toma la forma de una compra de VIUs. OutcomesX espera que las asociaciones puedan ayudar a llenar este vacío de satisfacción. Por ejemplo, las empresas que utilizan el mercado para las donaciones de sus empleados se asocian con Benevity, una plataforma de gestión de donaciones con sede en Canadá, que es utilizada por más de 900 corporaciones. Esta se encarga de conectar a los donantes de OutcomesX con oportunidades de voluntariado y otros tipos de participación en Benevity.
La asociación con Benevity también ayudará a OutcomesX a alcanzar su próximo objetivo: atraer a más donantes al mercado. "La infraestructura está lista para aumentar y escalaremos tan rápido como el mercado esté dispuesto a moverse", dice Saul.
Costanza cree que las organizaciones sin fines de lucro que están resolviendo de manera más efectiva los problemas sociales deben ser las que reciban más financiamiento, independientemente de su tamaño o nombre de marca. "Realmente, esperamos que esto cree más equidad y empareje las condiciones del juego", dice.
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Autora original:
- Sarah Murray es periodista, autora, conferencista y escritora especializada en negocios, sociedad y medio ambiente para el Financial Times y otras publicaciones.
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Este artículo es contenido original de la Revista Stanford Social Innovation Review publicado en la edición otoño 2023.
- Traducción del artículo Buying and Selling Social Impact por Leslie Cedeño
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